Se le conoce como el movimiento Slow Food (comida lenta) y se ha convertido en una práctica llevada a cabo por las mejores cocinas. Cuando hablamos de Slow Food nos referimos a los productos de Kilómetro 0, es decir, aquellos productos autóctonos, ya que los proveedores son agricultores, elaboradores cooperativas y establecimientos locales, y de temporada. Aquellos que incluso marcan el ritmo de la oferta gastronómica, adaptándose a las temporadas y a cada zona.
El uso de productos de Km0 trae muchas ventajas, tanto en lo económico como en lo social. Por un lado certifica el producto local y de calidad, ofreciendo al consumidor un alimento fresco y propio de la zona, y, por otro lado, ayuda al crecimiento del proveedor local. Sin olvidar su compromiso con el medio ambiente, ya que el uso de este tipo de productos en cocina evita la contaminación que produce el transporte de alimentos de lugares lejanos y tampoco se utilizan ni pesticidas ni transgénicos.
La cocina del Thalasso Hotel El Palasiet es una continua renovación de ideas, técnicas y de menús que juegan con la increíble oferta de productos Km0 que se pueden encontrar en la provincia de Castellón. Sin ninguna duda, se convierte en su gran valor añadido: “Lo primero que hacemos es buscar el mejor género que tenemos en nuestra provincia”, nos cuenta Paco Clausell, jefe de cocina del Thalasso Hotel El Palasiet.
Le encontramos a primera hora de la mañana, un poco antes de que empiece el ritmo frenético de la cocina, para que nos cuente un poco más sobre la relación entre el producto local y la elaboración de los menús, ya que es él mismo el encargado de escoger esos productos. “Lo primero es crear la receta y, a partir de ahí me reúno con la dietista para ver de qué manera podemos hacer menús que equilibren todo”, explica Clausell, “nos centramos, sobre todo, en la verdura y la fruta de temporada”.
El resultado es la unión perfecta entre alimentación saludable y alimentación responsable con el entorno: “No se trata únicamente de hacer un menú. Tenemos que tener en cuenta las necesidades de la gente que viene al Thalasso Hotel El Palasiet”. Y, es que, desde cocina lo tienen claro: “Lo primero que miramos es la salud de las personas, y a partir de ahí empieza todo a nacer”, incide Clausell. “El proceso más importante es el de encontrar el género de temporada que nos ofrecen y el control diario de menús con la cocina y la dietista. Esto es fundamental para nosotros”.
Un producto responsable con su entorno, de temporada y de calidad; una cocina que piensa, ante todo, en salud de sus clientes; y un equipo de profesionales que van de la mano para conseguir que todo funcione. Ahora sólo queda dejarse llevar por los sabores.